Liberación Canaria
Dicen que el voto es un derecho y un ejercicio de responsabilidad en aquellos países con cierta tradición democrática que debiera ejercerse con coherencia y conocimiento.
En Liberación Canaria hemos decidido dirigirnos a la sociedad civil canaria para pedirle que las elecciones europeas del 9J se conviertan en una prolongación de las manifestaciones y reivindicaciones del 20A. Proponemos ejercer el voto nulo ante la manipulación política como ejercicio de responsabilidad democrática y de coherencia porque Canarias tienen un límite y hay quienes apuestan por seguir la misma senda de crecimiento desenfrenado sin importarle su gente.
Invitamos a que se deposite conscientemente en las urnas un voto nulo de castigo a quienes gobernando y estando en la oposición han menospreciado, manipulado y desoído las necesidades de la sociedad canaria que reclama medidas, necesarias y urgentes, para mejorar la calidad de vida y poder vivir con dignidad en nuestra propia tierra.
Le pedimos a quienes manifestaron su descontento y hartazgo que vayan a votar el 9J y expresen con su voto nulo la desafección a los partidos políticos por sus despropósitos y manipulaciones. Que se haga bajo el lema “Canarias tiene un límite” porque fue el eslogan que nos unió a muchos miles de canarios y canarias por una causa común, Canarias, nuestro hogar.
A la vista del transcurrir de los días desde el 20A, observando los comportamientos, decisiones, acciones y declaraciones de menosprecio continuado desde el Gobierno de Canarias y partidos políticos de la oposición que se muestran incapaces y sin intención alguna de atender las necesidades sociales que se expusieron desde las manifestaciones del 20A, donde se manifestó el hartazgo de un modelo, preocupación, desolación, tristeza y rabia por la realidad social, laboral y económica que atraviesa Canarias, y observamos cómo se ningunean sus reclamaciones sin pudor en un juego que no es de recibo para quienes aquí viven. Estas actitudes políticas merecen una respuesta social contundente en las urnas, darles la espalda con el voto nulo.