
El gobierno militariza a los trabajadores de Unión Eléctrica de Canarias
Tras más de una semana en huelga y varios apagones generales, desde las 0 horas los 1.700 trabajadores de UNELCO pasan a depender de la autoridad militar, suspendiéndose por tanto el paro legal del personal que demandaba un Convenio Colectivo para mejorar su situación laboral. La medida de la militarización fue duramente contestada por los sindicatos, quienes se negaron a negociar mientras la empresa estuviese militarizada. El accionista mayoritario de Unión Eléctrica de Canarias era el Instituto Nacional de Industria del que era responsable el gobierno de UCD.