
El ayuntamiento del norte de Tenerife, presidido por su alcalde, Antonio Camejo, aprueba una resolución solicitando el relevo del general Franco como respuesta a los incidentes provocados por el militar el día anterior en el Puerto de la Cruz, durante la celebración de los actos conmemorativos del Día del Trabajador al instalar una ametralladora y otras armas de guerra. La moción invitaba al resto de ayuntamientos de la isla a secundar la petición. Dos meses después, tras el golpe militar contra el gobierno constitucional de la República, Camejo sería detenido y durante el mes de octubre de ese mismo año hecho desaparecer de la prisión de Fyffes, sospechándose que su cuerpo fue luego enterrado en algún lugar del Teide. Foto-Acta del pleno con los motivos de la solicitud de relevo-.